Protección contra el viento, polvo e insectos: Las gafas evitan que el viento reseque tus ojos y que partículas o bichos te golpeen mientras conduces, lo cual puede ser peligroso si te hacen cerrar los ojos o perder visibilidad.
Mejor visibilidad en diferentes condiciones: Algunas gafas tienen lentes polarizados, fotocromáticos o tintados que reducen el deslumbramiento del sol, mejoran el contraste y permiten ver mejor en distintas condiciones de luz.
Seguridad ocular en caso de accidente: En caso de caída o impacto, unas buenas gafas pueden proteger tus ojos de fragmentos, escombros o incluso del mismo casco si hay un golpe fuerte.