Proporciona un voltaje estándar adecuado para dispositivos eléctricos comunes en regiones donde el voltaje de 120V es el normativo, garantizando su funcionamiento seguro.
Amplio rango de voltaje de entrada 90-140VAC que permite al regulador adaptarse a variaciones del suministro eléctrico, protegiendo los dispositivos conectados incluso con fluctuaciones.
La potencia de 300W es suficiente para alimentar dispositivos de bajo consumo, como pequeños electrodomésticos o equipos de oficina, sin sobrecargar el regulador.
Compatible con la frecuencia de corriente alterna de la mayoría de los países, 50-60Hz lo que asegura que el regulador sea funcional en diversas regiones sin inconvenientes.
La corriente regulada de 2.73 A asegura un suministro constante y estable a los dispositivos, evitando daños por sobrecarga o picos de corriente.
La capacidad de manejar hasta 10 A en su modo no regulado permite alimentar equipos de mayor demanda cuando no se requiere una regulación estricta del voltaje, ofreciendo flexibilidad en su uso.