El puerto USB-C integrado permite recargar la batería directamente con un cable, sin necesidad de un cargador especial y con un tiempo de carga rápido (1–1,5 h aprox.). Se pueden cargar dos baterías simultáneamente con el cable incluido.
A diferencia de baterías Ni-MH que suelen descender de voltaje (por ejemplo, alrededor de 1,2 V), estas ofrecen una salida estable de 1,5 V, lo que garantiza un rendimiento más consistente y fiable en dispositivos exigentes.
Con 2200 mWh (≈1460 mAh) y más de 1000 ciclos de recarga, esta batería proporciona una gran autonomía y durabilidad. Su rendimiento prolongado ayuda a reducir el desperdicio y ahorro a largo plazo frente a baterías desechables.
Incluye varias protecciones (sobrecarga, corto, temperatura) y un indicador LED que facilita saber cuándo está cargada. Además, cuenta con certificaciones internacionales de seguridad (CE, RoHS, FCC), aumentando la fiabilidad y tranquilidad de uso.